miércoles, agosto 23, 2006

La vida secreta de las palabras

“Deja que la palabra sea humilde, que sepan que el mundo no empezó con palabras, sino con dos cuerpos abrazados, uno llorando y el otro cantando”.
Lê Thi Diem Thúy
Contemplo el mar escuchando una voz infantil: “En el fondo hay tan pocas cosas, millones y millones de litros de agua, rocas, gas, afecto, sangre, cien minutos, mil años, luz, ahora, ahora mismo, hace rato, lo he dicho antes, hay muy pocas cosas, silencio y palabras”.

Mi nombre es Hannah. Soy misteriosa, extraña, aturdida en mis pensamientos, solitaria, obsesiva para la limpieza y con ataques de ansiedad, ausente de lo que pasa porque soy sorda, y solo escucho lo que quiero escuchar, y cuando no quiero, me quito el aparato de mi oído. Nunca he tomado vacaciones en mi trabajo de la fábrica porque es algo que no me importa. ¿Para qué descansar si no tengo una vida propia? Ni siquiera me he enfermado. Mi jefe me obliga a tomar un mes de vacaciones y yo me marcho a un pueblo costero. Sin buscar, me llega la oportunidad de pasar mi tiempo en cuidar a un accidentado en la plataforma petrolera.

El eco infantil retumba diciendo: “¿A quién le importa? Si son sus vacaciones. Matar el tiempo antes de que te mate a ti. Olas y más olas, nunca hay dos iguales”.

Me dispongo a cuidar a Josef, tiene heridas faciales, quemaduras en su cuerpo, fracturas y una ceguera temporal. ¿Cuándo imaginaría que mi soledad y los conflictos de mi vida pasada, se la entregaría a un desconocido? ¿Cómo creer que después de mucho tiempo yo sonreiría ante un hombre sarcástico al que le duele la vida? Me dedico a mentirle para frenar mis impulsos y sobre todo porque yo no creo, vivo escéptica pensando que la vida no es justa.

En la plataforma se siente la soledad. Se vive. Somos pocos los que estamos. A mi me gusta que me dejen en paz. Hablo poco. Sin embargo, los observo y la oca me maravilla de cómo forma parte de este mínimo mundo. La música nostálgica nos envuelve y se pierde con la voz del viento confundida entre las olas del mar. Me gusta columpiarme ante el mar y sentirme libre.

Los cuidados intensivos que le doy a Josef se convierten en una convivencia en donde se unen nuestras soledades, nuestros antiguos recuerdos, nuestros miedos, nuestros deseos, nuestra cruda realidad. Y me atrevo por fin a decirle quien realmente soy y permito que toque mi piel y mi rostro para que conozca las heridas de mi trágico pasado y él, así con su ceguera, se enamora de mí.
Llega el momento en que Josef debe ser trasladado a un hospital, ha pasado el peligro y yo decido seguir mi camino. Él me dice: “¿vendrás conmigo? ¿tomarás mi mano y me ayudarás a mirar?”. Yo sigo mi camino sin responder. No quiero atarme a nadie.

El tiempo lo dirá. El tiempo responderá. El tiempo decidirá. Y el tiempo trajo de nuevo a Josef a mi vida. Y me vuelve a pedir: “ven conmigo”. Tan segura estoy de mi respuesta que se la digo: “Si decidiéramos ir a un lugar juntos, me da miedo que en un día cualquiera, de repente, empiece a llorar y llorar y llore tanto que nadie me pueda parar y las lágrimas llenarán la habitación, me faltará el aire y me arrastrará contigo y nos ahogaremos los dos”. Nunca imaginé que Josef me contestaría: “Aprenderé a nadar. Lo prometo”.

37 comentarios:

Clarice Baricco dijo...

Ficha técnica:

Dirección y guión: Isabel Coixet.
Interpretación: Sarah Polley, Tim Robbins, Javier Cámara, Julie Christie, Daniel Mays, etc.
Fotografía: Jean Claude Larrieu
Música: Alfo
Montaje: Irene Blecua
Dirección artística: Pierre-François Limbosch
Vestuario: Tatiana Hernández
Producción: Esther García
Producción ejecutiva: Agustín Almodóvar y Pedro Almodóvar
País: España.
Año: 2005.
Duración: 122 min.
Género: Drama.

MaLena Ezcurra dijo...

Una impresionante denuncia contra la tortura humana que deja sin palabras.

La vida secreta de las palabras es un magistral lección a favor de la Paz y el respeto humano, del amor como fuerza creadora y redentora. Pero es importante que no olvidemos que es un alegato contra la tortura y un homenaje a favor de todos los que luchan para que no nos infecte.

Por lo tanto, me quedo en silencio y te contemplo en toda tu intensidad de mujer, enhebradora de vida.

Mi admiracion de todos los dias.

Te beso .

இலை Bohemia இலை dijo...

Que belleza de film...Que bueno que te acordaras de mí con una peli así, a causa de aquel post que escribí.Es una historia tan bella, de personajes torturados y sentimientos que flotan con tanta naturalidad en un espacio frío y alejado de todo. Querida Clarice de esta misma directora también te aconsejo (en caso de que no la hayas visto ya) su anterior peli "Mi vida sin mí", otra joyita con la misma protagonista. Besos tesoro....

. dijo...

Una bella película y un bello gesto de tu parte recordarla.

Te dejo mi cariño.

bohemiamar.

Francisco Ortiz dijo...

Tu sensibilidad, Clarice, meciéndose dulcemente como las olas del mar. Un saludo.

Joel Langarika dijo...

Me asombro, me quedo callado, volteo a los espejos y me observo...entonces recuerdo mi querida Clarice, q le he escrito un poema, luego se lo entrego. Gracias por todas tus palabras. un abrazo y un beso marino.

Anónimo dijo...

Ojalà todos aprendamos a nadar algùn dìa. Tu manera de narrar esta pelìcula me atrapò; definitivamente la verè.

Heriberto dijo...

Aprender a nadar en la tierra firme y resquebrajada de una cama de Hospital, no es eso lo que como humanos podemos hacer para conjurar al amopr y para espantar el odio de otros humanos.


Definitivamente iré a ver la película, luego del "trailer" tan cautivante que has escrito.
Saludos.

Silvia dijo...

Qué bella película, Clarice...El personaje, al principio de la película desconcierta. No entiendes sus rarezas, su interés en seguir trabajando de manera mecánica...Al final lo comprendes todo, comprendes sus miedos y su aislamiento. Y después de tanto sufrimiento allí está Josef, como el cielo que se abre después de una temporada de lluvias que impide ver el sol.
Gracias,Clarice. Muchos besos

mart dijo...

Clarice,Clarice...nunca me dejas indiferente...

mart dijo...
Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
mart dijo...
Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
Beatriz Valenzuela dijo...

clarice: estoy hacia adentro.




niña lesa... no me he dado cuenta que es una pelicula. pero segura estoy que esa historia se ha vivido

malambruno dijo...

Hermosa película y hermosa relación la de los protagonistas. La enfermera tiene heridas mucho más profundas que el enfermo (le han matado el alma) y es el enfermo (maravilloso personaje) el que en parte palía las heridas de la enfermera.
Tu post, estupendo como siempre.

Sandra Soto dijo...

Ya quiero ver la pelicula. ¿Tendrá la valentía ella de contestarle a Josef que si?
Mi vida sin mi es una pelicula extraordinariamente bella que me sacudió, me pasó lo que a Hannah, casi innundo la habitación de llanto, mis ojos se desbordaron y tuve problemas al otro día para quitar lo hinchado de mis parpados. fué demasiado dolor.Ahora que narras esta pelicula dejas ver que la trama es también desgarradora.
¡Que manera de acercarnos a este film!
saludos con aroma de lluvia.

Unknown dijo...

Lo he leido y me ha gustado, inquietado...Me recordaba a algunas escenas de: "Por quien doblan las campanas"...No he visto la pelicula, parece muy emotiva.
Se que está en el video club la veremos!
Un abrazo y saludos!

Gatito viejo dijo...

Magnífico post. Vi la película de I. Coixet y me impresionó mucho. Es perfecta. Impactan los silencios de la protagonista tanto como sus palabras cuando cuenta su terrible historia. Sin duda es una película digna de verse. De esas que te hacen pensar y pensar en las atrocidades humanas y en el sufrimiento. La historia de amor entre ellos es un bálsamo que mitiga las heridas de ambos.
Sólo una duda, para Clarice o para quien quiera contestar. La voz en off de una niña que se escucha en determinados momentos qué creéis que significa, ¿quién es?
Saludos

Ninoska Mermoud dijo...

Tu texto recrea muy bien el nudo central de esta hermosa historia, tan humana y tan llena de afecto: La posibilidad de auto-redención al redimir a otros, la sensibilidad humana alcanzando sublimación en el trueque, en la compenetración biunívoca.
Describes todo, Clarice, pero despojas el texto de sentimentalismos fáciles o gratuitos, y eso nos permite disfrutarlo mejor.
Un abrazo.

Beatriz Valenzuela dijo...

claricce: visitame

≈Gr¥§εL≈ dijo...

Vaya, que respuesta...
Me has matado...

te quiero!

Anónimo dijo...

Sin duda, tu narración cerró con broche de oro; antes de leer la respuesta de Josef hubiera dicho que es sabio tomar una decisión a tiempo, como dicen "a tiempo amar y desatarse a tiempo" pero luego de lo dicho por él me quedé sin palabras.

Beatriz Valenzuela dijo...

clarice..clarice. eres solo belleza.win menters ha sido una coincidencia. es sentimiento, me conmueve.

Anónimo dijo...

La referencia, me sirve para apuntarlo y buscar la película.
Parece un buen film para compartir con mis alumnos.
Gracias.

leeleean dijo...

Algún día aprenderemos a nadar, o mínimo a pisar en el campo minado de palabras.
Isabel Coixet, ella sola como es.

Coral dijo...

Algún día aprederemos a nadar, como pecesitos en este mar de la vida...

Preciosa y conmovedora historia

habrá que ver la película.

Un abrazote seguimos en contacto ;)

Isabel Barceló Chico dijo...

Muy hermoso, clarice. Siempre es posible encontrar el amor, aún en medio de la mayor desolación. Besos y gracias siempre por tus textos.

Anónimo dijo...

Hola Clarice:

Bella introducción, me mantuvo expectante, sin entrar a la sala de cine.

Francisco dijo...

Hermoso relato, hermosa canción.
El amor es hermoso dure lo que dure.

"Se miente más de la cuenta por falta de fantasía...?

Se miente porque la mentira es un armade defensa.

Un abrazo

S.B.S. dijo...

Coixet esuna de las esperanzas del sine español. Sus dos películas La vida sin mi y esta última me dejaron clavdo a la butaca!

Luis Herrera dijo...

Espectacular, y si actúa ese actorazo de la mirada perdida que es Tim Robbins, mucho mejor.

Dese Sueños de Fuga se convirtió en lo máximo.

un abrazo grande

MaLena Ezcurra dijo...

Extraño extrañarte.

Mis pasos van por tu vereda.

:*

Anónimo dijo...

"Y a donde quiera que ella va
lleva consigo aquéllo que tanto la ama: las palabras escondidas tras sus ojos y sus manos que dibujan letras, mecidas por el viento y humedecidas por la lluvia, moviéndose a pasos ligeros y frágiles, como los hetéreos seres que no son de este mundo..."

Tuya siempre,
Priscila

Noa- dijo...

Hace tiempo que tengo pendiente ver esa película, quizás ahora que dispongo de algo más de tiempo lo consiga.
Pero desde luego tus letras han doblado las ganas de verla.

Saludos

Miguel Sanfeliu dijo...

Qué emotivo, qué bien escrito, Clarice. Ponerte en el lugar de Hanna es muy emotivo. Esta película es un gran impacto, en especial la escena en la que ella cuenta… ya sabes. Muy potente.

ecasual dijo...

Excelente descripción y gran final.
Saludos.

EBE dijo...

.....al igual que el Faraón, he quedado muda

Anónimo dijo...

Vi esta película, Graciela, y me conmovió.

Isabel Coixet es estupenda.