Anónimos

Fotos: Graciela Barrera

Me alegra muchísimo cuando un amigo querido logra cumplir un sueño y Miguel Sanfeliu es uno de ellos. Él recién acaba de publicar su libro de relatos titulado Anónimos, editado por la colección Vagamundos de la editorial “Traspiés”. No es el primer libro que escribe, pero sí el primero que publica. Un precioso libro ilustrado por su mismo autor.

Por tres años consecutivos he leído a Miguel Sanfeliu, desde reseñas de libros y películas, cronista de ferias literarias, hasta como un libre y profundo pensador en sus reflexiones personales. Pero cuando me toca el turno de leer sus relatos, mi sonrisa y mis gestos pueden paralizar. No es para menos, él logra provocar.

Abrir su libro es entrar a un mundo de historias de fantasía, de recuerdos, de conversaciones, de sensaciones, de dolor, de imaginación y realidad. Letras que resultan convincentes. Inventa y plasma en el papel personajes que cobran vida. Juega con ellos. Uno sufre o goza con la historia contada. Uno quiere más. Uno no se conforma al saber que la historia tiene final. Y leerlo junto con sus dibujos tan peculiares me ha resultado de maravilla. Se convierte en un libro muy especial. Dibujos y letras van de la mano. Letras en donde nacen rostros y movimientos convertidos en dibujos. Dibujos convertidos en historias fabricadas con la paciencia y sin prisas del escritor.

Solo, Anónimos, El campeón de Arequipa y Renacer, sus obras, fueron escritos en diferentes tiempos. Surgidos por motivos diversos y únicos. Al estar integrados en éste libro, a Sanfeliu le gusta pensar que los relatos fueron escritos para llegar a estar juntos, que éste era su destino secreto desde el principio.

Miguel Sanfeliu escribe porque le gusta escribir, para intentar explicarse el mundo, para robar vida a la muerte, posibilidades al destino. Siempre ha escrito y la literatura ha sido la vía de escape para huir de la realidad y para seguir adelante. Dibujar para él es más un medio que un fin y, lo ayuda a concentrarse y visualizar. Él señala que nunca se deja de escribir y, con cada texto, uno trata de mejorar.

Anónimos está siendo presentado en diversas ciudades de España. Su autor ha colaborado en el monográfico que la revista Batarro le dedicó al escritor Medardo Fraile, en la antología de ciencia ficción Visiones 2002, en los libros colectivos Las miradas de la noche. Cine y vampirismo, (Ocho y Medio, 2005) y En las ciudades (Notorious,2009), en revistas literarias como Clarín y Narrativas, y el suplemento cultural mexicano Laberinto, del diario Milenio Portal. Colabora en el blog de crítica literaria La tormenta en un vaso y su blog se llama Cierta distancia.

Miguel Sanfeliu, el hombre tímido que disfruta del mar sin tocarlo, de honrar a Kafka, de refugiarse en la lectura, de perderse en el cine, de escuchar jazz, de recordar a Hooper, de pasear en moto, de fotografiar su mundo, de dibujar la vida, de soñar a cierta distancia… está decidido a continuar con el juego de narrar historias.

Sin duda alguna, Miguel Sanfeliu no ha perdido el tiempo en escribir. Dejó de ser un “escritor casi inédito”.