martes, agosto 30, 2011

Agosto

Pintura: Henri Matisse

Agosto lo escribo con sangre. Desde la sangre derramada de mi madre, cuando me vio nacer en el octavo mes de un lejano año, hasta la sangre excesiva que ha sido derramada en este país. Y, todavía, con dolor, tengo que nombrar la sangre de mi amado perro y aceptar que no pude detener su inevitable partida.

Puedo escribir agosto de otra manera:

Agosto, te esperé con ansia para celebrar un nuevo año más de vida. Agosto, nos quitaste almas inocentes. Agosto, nos ofreciste lluvia en forma de lágrimas. Te llevarás el verano. Agosto, fuiste la puerta para los nuevos pájaros que iniciaron un nuevo curso escolar. No a todos les interesa obtener fuertes alas. Estarán los árboles mayores para impregnarles conocimiento. Agosto, a pesar de todo, no dejarás de ser.

A veces, no se puede escribir con tanta desolación entre un país que lucha por sobrevivir. No obstante, tendré que hacerlo. De la tristeza, surgirá la alegría. Y volverá la fuerza de las manos. Movie, mi perro, espera que le dedique mis letras. Y la vida en sí.

¿Qué traerás Septiembre?



sábado, agosto 27, 2011

B


Pintura: Joan Miró

Bethania, bella brasileña, bibliotecaria bilingüe, busca biografías bíblicas. Boca bonita, balbucea: bendigo brillante biblioteca.

miércoles, agosto 24, 2011

Ella sobre ruedas

Foto: Graciela Barrera


Una bicicleta sabe lo que es el viento.

Y sabe mirar mientras tú pasas sin darte cuenta de que allá va ella velozmente.



viernes, agosto 12, 2011

Seis años contándome la vida

Foto: Graciela Barrera

Dichosamente llegué a los seis años de contarme la vida sin interrupción.

Aunque mis manos estén más tiempo en el camino de la brevedad, sigo creyendo en el blog y me resisto a que muera. Todavía hay mucho por compartir. Quizá, cuando aprenda a escribir, dejaré de escribir.

El blog ha sido una de las puertas más importantes en mi vida. Y la llave, sigue intacta.

Muchísimas gracias a todos lo que han llegado a esta casa y se han detenido en mi camino. Por los que se fueron y por los que han permanecido.

Con sus ojos, he crecido.

Celebro con ustedes.



miércoles, agosto 03, 2011

50 maneras de perderme conmigo misma

Foto: Monserrat Loyde


· Recordar el rostro de la abuela.

· Abrir las ventanas.

· Escuchar el canto del pájaro.

· Abrazar a mi perro.

· Impregnarme del café recién hecho.

· Lavar la ropa como si lavara el alma.

· Prender la computadora.

· Andar en bicicleta.

· Besar mucho.

· Leer y subrayar mis libros.

· Reunirme con la familia.

· Desayunar con las amigas.

· Nadar.

· Escribir cartas.

· Ser anfitriona con los amigos.

· Abrir una botella de vino.

· Caminar y descubrir nuevos caminos.

· Sentarme en un parque y observar a la gente.

· Fotografiar como si fuera la única foto.

· Consentirme en el salón de belleza y leer revistas superfluas.

· Recibir un masaje corporal relajante.

· Disfrutar de un café o un té verde mientras leo en una cafetería.

· Involucrarme con el arte y la cultura.

· Refugiarme en el cine.

· Ir a las librerías y a la tienda de discos y películas.

· Escuchar diversos géneros musicales e ir a conciertos

· Gritarle a Caetano Veloso.

· Degustar la comida de mi chef predilecto.

· Coleccionar lo que me gusta.

· Arriesgarme y perder el miedo.

· Escuchar, reflexionar y aprender.

· Leer la Biblia.

· Permanecer en casa muchos días.

· Bailar, cantar y dibujar sin saber hacerlo.

· Armar rompecabezas.

· Comer chocolates.

· Visitar a los médicos.

· Reír o llorar.

· Mirar la lluvia, el mar, la montaña o los árboles.

· Disfrutar de la soledad.

· Dormir y olvidarme del mundo.

· Viajar.

· Tener blog, facebook y twitter.

· Escribir.

· Tener un amor.

· Tener una hija.

· Creer en Dios.

· Sonreírle al pasado.

· Vivir el presente.

· Soñar el futuro.