Pintura: Joaquín Sorolla
Ignorancia
Me gusta levantarme cada día sabiendo que no sé nada.
Muro
Que se caiga el muro de la preocupación.
Carretera
Los viernes por la noche, camino por la carretera para encontrarme con quien domina mi corazón.
Puntualidad
La puntualidad me distingue. ¿Por qué tengo que esperar al mundo?
Instrumento
Si fuera un instrumento musical, sería un saxofón.
Club
Me dieron la bienvenida en el club de los incomprendidos.
Peluquería
Un lugar de encanto donde los cabellos caen como los años.
Soledad
Y de repente pienso que la soledad es como el algodón que pasa suavemente por el cutis.
Dolor
Me duelen los ojos. Me duelen los dedos. Me duele el cansancio. ¿Duele el cansancio?
Invierno
Debo abrigar bien el corazón.
Lluvia
A veces pienso que el exceso de lluvia es el exceso de preguntas sin respuestas.
Miopía
¿La física o la del corazón?
Cartas
El hombre se cansó de escribir cartas de amor. A mí ya no me tocó recibirlas.
Quisiera
Quisiera
Quisiera recuperar la infancia de mi hija. Quisiera recuperar la belleza de mi juventud. Quisiera recuperar la vejez de mi abuela.
19 comentarios:
Como siempre me ha gustado mucho esta nueva entrada en tu bitácora.
Un cariñoso recuerdo desde Madrid en un soleado domingo de noviembre.
excelentes reflexiones, Graciela...
... 'quisiera', y esa ignorancia puntual y deseable de cada día...
un beso
Amiga, el cansancio no solamente duele, que es algo contrastado, sino que incluso mancha la ropa...
Es perfido de por si.
Ah, Sorolla, este verano -en Madrid- vimos una Magna Exposicion de Sorolla, que hizo que se me quitase el hipo que tenia desde hacia un par de dias.
Sorolla... Julio Romero de Torres...
Que gentes esas.
Un abrazo, amiga
Tus reflexiones son como un espejo en el que nos vemos. Gracias por ese reflejo.
Besos
Terrible palabra... quisiera.
Acabo de encontrar este precioso blog y es simplemente maravilloso. Algunas de tus entradas me han puesto sensible y me han hecho llorar, como una de años atras dedicada a Movie. Acabo de perder a mi perrita Muñeca de 18 años... yo tengo 24 y siento que una parte de mi alma se fue con ella.
Sin duda me hare asiuda lectora tuya. Besos desde Veracruz!
Tu miscelanea ilumina.
Que lindos tus posts, este y el anterior del hombre que miraba el mar. Estoy en rodaje por mi salud pero siempre mas vale aparecer tarde que nunca. Hartos carinos.
Ivania
Me encantan estas listas.
A veces creo que en pocas palabras y en (a simple vista) simples relaciones que hacemos entre ellas se puede llegar a vislumbrar realmente a las personas. No es necesario grandes párrafos llenos de complejas palabras y formas.
Es justo en ese sentido que tus escritos me gustan y "reflejan" tanto.
Me encanta tu blog =)
Saludos!
me ha encantado esta entrada porque me ayuda a conocer más ese universo que te habita.
Bss
Unos pensamientos deliciosos, querida clarice, que comparto. A mí me gustaría tener la belleza de tu hija. Besitos, guapa.
Me interesan todas tus misceláneas. !Que bueno!. Me voy a quedar leyendo.
Un abrazo
Es preciosa esta entrada y me identifico con casi todo. Hoy yo también pertenezco al club de los incomprendidos, ¡hoy más que otros días!!!
Besicos muchos.
Si confiesas con tu boca que Jesucristo es tu Señor y crees en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salv@.
Romanos 10.
Me has alumbrado el día, el mío y el de mi corazón, con estos levísimos pañueños de seda bordados de sabiduría. Me he anuado al cuelo agunos, y como no ando sobrado de respuestas para mucho, me estoy preparando para la inundación. Un beso renovado y muy grande
Muchos de estos pensamientos, me resultan universales, Gabriela.
Un abrazo.
Sorolla, uno de los grandes pintores de la luz y quizás el que mejor ha plasmado la magia del Mediterráneo. Gracias por compartir con nosotros estos pensamientos que están llenos de sabiduría.
Un abrazo
Interesante esta serie de pensamientos. La añoranza de lo pasado, la soledad, la melancolía. Una bella entrada.
Un abrazo
Y bienvenida al club ;)
Yo también quiero recuperar la infancia de mis hijos, se va como agua entre la manos...
Son unos pensamientos hermosos, sensibles, personales y a los que agradecer que se nos brinden puros, enteros.
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