Pintura: Gabriela Peralta
Recuerdos
Enterré mis recuerdos debajo de mi árbol favorito. Su tronco se fortaleció y una diversidad de hojas cae para que yo los escriba.
Escribir
Escribir es una manera de vencer la tentación y de imaginar la historia que no se vivirá.
Pétalos
Traigo una espina enterrada en mi boca. Es que mi lengua saboreó pétalos de rosa.
Tristeza
La tristeza huele a tierra de un pájaro abandonado.
Edad
No me importa tu edad. Sólo lo que escriben tus manos.
Escaleras
A veces, quisiera estar siempre entre muchas escaleras. Y soñar que toco la esperanza mientras subo cada una de ellas.
Anciana
Soy una anciana que quiere escribirte una carta sobre tu espalda.
Brevedad
Me gusta la brevedad. Excepto cuando te beso.
Fuerza
Tener la fuerza de cerrar una puerta. Azotarla. Y no abrirla nunca más.
Una
Una lágrima cae sobre la punta de un lápiz. Una hoja se mancha. Una letra se pierde. Una mano se conduele. Una voz se calla.
Dolor
Me duele este cuerpo que lleva palabras enterradas. Me duelen estas manos que llevan palabras vacías.
Carta
La carta que te escribo día a día es como escribirte sobre una orquídea.
Receta
No tengo ninguna receta propia para verme joven. Lo único que tengo son tus letras que me rejuvenecen.
¿Quién es?
"¿Quién es ese señor tan alto? ¿Es el que quita nuestros problemas?" No pequeño mío, es sólo un poste.
Regadera
Debajo de la regadera, escribo sobre el agua. La pared se empaña. Las letras escurren sobre mi cuerpo. Lentamente caen a la coladera.
Pregunta
Le pregunté: “¿Cuándo me contarás la historia de ese amor que te atormenta?” Respondió: “Nunca”. Lejanamente escuché su murmullo: "Eres tú".
Inofensiva
¿Y por qué me tienes miedo? Mi pasión es inofensiva.
Dedos
Los dedos tartamudean breves silencios.
Esquina
Todavía no olvido aquella esquina. Una mano diciéndome adiós. Para siempre.
Boca
La boca duele de tanto escribir una historia entre dos.
Imposible
Tengo una montaña y un mar imaginario. Lleva tu nombre: Imposible.
Eco
Soy el eco de ese caracol que tienes en tus manos.
Silencio
Ciertos silencios deberían de tener voz.
Lágrimas
Hay lágrimas que deben salir del cuerpo como una gran danza. Levemente las piernas se las entregará al viento.
Felicidad
La felicidad me duele en los ojos, en las manos, en el estómago, en los pies.
Secretos
Cierra tu puerta y recoge tus secretos. Ordénalos por recuerdos. Regálaselos al mar o entrégaselos a la niebla. Y escribe sobre esa pared.
Búsqueda
Seguiré buscándote entre las palabras. Hasta encontrarte. Darte mi voz. Y nombrarte.
Ruido
Qué duro ruido provoqué en mí misma.
Avión
Sobre mi cielo pasa un avión. Como el anuncio a una nueva vida.
Pérdida
Se pierde un autobús. Se pierde un boleto. Se pierde un beso. Se pierde la cordura. Se pierde el instante. Se pierde la bienvenida.
Flores
No será necesario que me entierren con flores. Mis letras como flores marchitas serán olvidadas.
Ojos
Se me cayeron los ojos. Los busco sin querer encontrarlos.
Botas
Una mujer guardó en sus botas los recuerdos de su viaje.
Pájaro
El canto de ese pájaro es un grito desgarrador. La lluvia hirió su tendedero y el sol no le da la salvación.
Quizá
Quizá me conozcas cuando sea una anciana. Quizá en sueños. Quizá en ese París que nos espera. Quizá en ese quizá que no llegará.
Cerradura
Cambió la cerradura y cerró la puerta injustificadamente. Mi llave cayó en un charco de sangre.
Inocencia
La niña derramó su tristeza en la sábana sin saber que al otro día sería golpeada.
Mediocridad
Qué tristeza es ver pasar la mediocridad y no tener el poder para matarla.
Mediocridad
Qué tristeza es ver pasar la mediocridad y no tener el poder para matarla.
Deseo
El deseo de tocar tu mar y nadar entre tus letras.
Vestido
Cuánta vida en ese vestido que cayó lentamente sobre el mar.
Niebla
La niebla es un rebozo que cubre la mirada.
Cicatriz
Esa ola lleva en su vientre una hermosa cicatriz.
Espalda
Dos cuerpos que se dan la espalda también se aman.
Ombligo
Con un soplo despidió el último beso guardado en su ombligo.
Arrancar
Me arrancaré un miedo. Y seré tierra.
Mirar
Miraré la vida y me dolerá su belleza.
Dormir
Dormir es escribir un sueño.
Tú
Tú eres la continuidad de mis letras.
Manos
Estas manos húmedas necesitan secar el papel y echarlo a volar.
16 comentarios:
Me gusta lo que escribes querida amiga. Un verdadero placer.
Guardaré, querida Clarice, tus pensamientos en mi sueño, y volveré a ellos, lentamente, para contarte la vida que tus yemas cuentan; para contarte historias de lluvia pertinaz que inunda el corazón; para contarte historias de baños de espuma y caricias de cabellos largos de niña princesa con espuma; para contarte historias de niñas que juegan y sueñan. Y para darte un abrazo, de luz.
Ya sabes que me encantan estas entradas tuyas con esas síntesis, a veces geniales, de tus pensamientos. "Fuerza" me ha recordado a una cosa de Rilke que decía algo así como "Haz de cada pared un escalón".
Un abrazo bien grande.
Tus pensamientos parecen salidos del corazón de un pájaro por su frágil belleza.
Hay algo en tu palabra que embriaga como una melaza alicoreada.
Quiero a tus alas.
M.
Siempre te lo digo...me encantan esas joyitas breves...
Un beso guapa!!!
Me encantan tus reflexiones,
En esta no estoy de acuerdo
"Mis letras como flores marchitas serán olvidadas" .
Imposible olvidar a alguien que escribe así.
Besos
Mi querida Graciela...
Woow me quedo con la brevedad. Me encanto. Gracias por compartirnos tu luminosidad. Besito
Me gusta tu blog!!
Bonitos pensamientos
Salu2
www.miltyflinn.blogspot.com
¡Qué preciosidad de pensamiento tienes! De otra forma sería imposible sacar a la luz este cofre de palabras, sutiles, delicadas, hondas, dolorosas.
Anciana, brevedad, tierra, anciana, ojos, pájaro, vestido...
Es que el tesoro eres tú. Seguro.
Muchos besos
Preciosísima ausencia de brevedad. Ahí, a eternizarme. Mira, te hará gracia: http://abrolaboca.blogspot.com/2007/01/besos.html
Besos amiga.
Querida Clarice
Maravilla de miscelánea de pensamientos
Ese de la Fuerza y el de Quizás, te lo dije en twitter, me mataron.
Un beso
Te has superado a ti misma. No me ha gustado uno, ni dos, sino que me han gustado muchos, muchos.
Me sobrecoges, Graciela.
Cada joya de frase encierra, como un precioso cofre, la sabiduría de alguien que siente a la par que ama y sufre.
Vuelvo a mirar en tus cofres, hay más tesoros que admirar.
Un abrazo.
Esto sí qye sirve para argumentar "Lo bueno, si breve, mejor"
Exquisito pensamiento.
Abrazos
Esta entrada es un prodigio de cosa... Un prodigio...
Otro abrazo, amiga
Graciela, he tardado pero quería leerte con calma y no la he tenido antes.
De todas maneras volveré a ver si aprendo a enterrar debajo de un árbol algunas cosas.
Besicos muchos.
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