A veces, la lluvia duele y duele mucho. Sobre todo cuando su humor no es romántico. Quisiera comprenderla y tratar de encontrar su propio dolor. Ese que arrastra con tanta furia y termina de hundir a un pueblo. La lluvia tendrá sus motivos y, nosotros los que vivimos en la cercanía o en la lejanía, no podemos ser indiferentes. Nuestras lágrimas se confunden entre tanta lluvia.
Al estado de Veracruz le ha llovido fuerte. Tlacotalpan se encuentra en la lista. La ciudad que fue declarada Patrimonio de la Humanidad, la ciudad llena de alegría y de encanto, la ciudad con sus fiestas tradicionales, la ciudad que baila y canta, la ciudad de los bellos colores, la ciudad de la hermosa gente, la ciudad que ha sido muy fotografiada, es un fantasma lleno de agua. Sus habitantes perdieron parte de su vida, se han ido hasta que la ciudad vuelva a la normalidad.
Estamos tristes, pero a la vez, recordamos que pase lo que pase, los veracruzanos nos caracterizamos por nuestra alegría y que en los momentos difíciles, estamos para ayudarnos.
Sé que Tlacotalpan volverá a tomar su caudal para darnos lo mejor. Y cuando llegue Germán Dehesa a reposar, el río Papaloapan volverá a reír.
Pd. Otro texto que escribí: Tlacotalpan de mis amores.
12 comentarios:
Cuando veo noticias de México, pienso en las personas que conozco a través de los blogs.
Como suele pasar, la lluvia habrá dañado a los más necesitados, espero que la solidaridad dé un respiro a la ciudad y sus gentes.
Bellísima chica. Impresionante.
Muchos besos
Lo siento mucho Graciela.
Es horrible cuando la naturaleza se enfada y deja la tierra tan mal trecha.
Espero que todo vuelva pronto a la normalidad y que al menos, las personas no sufran demasiado, siempre suele llover sobre mojado y quienes más lo necesitan, son los que peor lo pasan y m´s sufren.
Gracias por compartinos los sentimientos de hoy.
Besicos muchos guaspa.
Voy a ver si lo has puesto en Fb para compartirlo.
Volverá la alegría, seguro.
Un abrazo muy grande, querida Graciela.
Me uno al dolor de todos por tan trágicos acontecimientos.
También me uno a su dolor. Es terrible todo aquello. Animo y fuerzas.
Fuerza, mucha fuerza.
Lo siento muchisimo... te acompañamos...
Besos y abrazos grandes...
Clarice
No había querido ver las imágenes de Tlacotalpan, pero ayer vi un par de fotos y sentí horrible. Tan bello lugar anegado. Duele la lluvia torrencial, dices bien. Y más duele la indiferencia social. No obstante, como tú, tengo la esperanza de que Tlacotalpan vuelva a brillar.
Un abrazo
Ojalá que la lluvia vuelva a vestir su mejor color, el de la vida.
Un abrazo mi querida Clarice.
Lamento lo ocurrido y espero que pronto se restablezca la normalidad y se subsanen los daños.
Ojalá llegue la ayuda suficiente.
Un abrazo
Querida amiga, espero que muy pronto os recuperéis de esas lluvias traicioneras y todo regrese a la normalidad, hasta donde ello sea posible. Debe ser durísimo perderlo todo, mi corazón está con ustedes. Un abrazo enorme.
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