martes, enero 02, 2018

Año Nuevo

Pintura de Marc Chagall
La vida me dice que soy la diosa de mis hojas en blanco y que puedo armar la historia que se me venga en gana. Escribir por ejemplo: Mi fin de año no fue cómo yo creí que sería: lejos de mi hogar, sin aretes y con un cerebro perdido. En el silencio pude constatar que la vida te mueve para que uno no se estanque. Y para reírse de uno mismo y recordar que nada es perfecto. Que cualquier día puede ser esplendoroso aunque sea un pájaro enjaulado. Despertar sabiendo que un 2 de enero puede ser el inicio de un Año Nuevo. Despertar para volver a encontrarme con el amor. Mirar y callar. Escuchar y pensar. Desear y amar. Saber que tiene vida. Que yo tengo vida. Atreverse a escribir aunque nadie comprenda el latir de un reloj que no se usa para no ser esclavo de nada, ni de nadie. Ahora sé y estoy segura, que cada día será una oportunidad para que en mi organismo fluyan ríos de agua viva, mi corazón tenga plenitud y mis pensamientos se sostengan con la fe sembrada en la Palabra que no vuelve vacía.


2 comentarios:

LA CASA ENCENDIDA dijo...

Cada día es una experiencia nueva y hay que exprimirla y saborearla, como si fuera la última. Eso es lo que nos enseñas guapa. Feliz 2018
Besicos muchos

giovanni dijo...

Me gustó enormemente leer lo que escribiste y sentí tu presencia. Incluso "ví" escribiéndote estas letras. Feliz Año Nuevo!

Entre otras cosas, estoy haciendo una película sobre un viaje en barco desde Malé (Maledivas) a Mumbai y veo fluir mucha agua...
Tengo que pensar que voy a decir en la voz en off (se llama así?) o sea la historia que cuento para acompañar las imágenes. También estoy pensando si voy a agregar la voz de Astrud Gilberto que escuché en mi fantasía cuando estaba en la terraza del restaurante en la parte trasera del barco, un crucero con el nombre "Classico" al que habían agregado neo, o sea "neo Classico". Te avisaré cuando esté listo.

Un beso