viernes, noviembre 25, 2005

La mirada del calendario


Volteó su rostro y sus ojos se fijaron en el calendario. Hizo un alto mirándolo fijamente. Se percató que es viernes 25. Mismo día y mismo número de cuando aquellas orquídeas dejaron su color púrpura para convertirse en blancas.
Sus ojos permanecieron sin pestañar para recordar que en un viernes 25 conoció el amor.
Un invierno suspiró en un otoño.
En un círculo encerró el día 25 y se preguntó:
¿El amor se puede guardar en un solo día?

1 comentario:

: ) dijo...

Hasta en un segundo !!!