Queridos Reyes Magos:

  Foto: Graciela Barrera

Por la insistencia de mi querida amiga Lety les escribo con timidez y desgano. Pienso que me pondrán obstáculos por mi edad. Además, debo tenerlos aburridos con la misma historia de cada año, pero no tengo otra. ¿La recuerdan? Por lo tanto, no les quitaré tiempo. Ustedes saben que me conformo con libros y, ya que en casa me esperan muchos por leer, omitiré pedírselos. De acuerdo. Ni libros, ni discos, ni películas.

Quisiera pedirles salud, aunque creo que ustedes no la otorgan. Supongo que se les facilitaría prepararme un encuentro con el Dr. House, ¿verdad? En su consultorio, obvio. No pretendo cenar con él.

¿Necesitan más ideas? Les he insistido mucho que me traigan nuevamente a mi Caetano Veloso. Y ya que estamos en tema musical, también puedo aceptar boletos para conciertos. Este año quiero escuchar una gran variedad musical, pero ¡en vivo! ¿Ejemplos? Brad Mehldau y Joaquín Sabina. Entre muchos más.

Tampoco me molestaría que me ordenen que vaya a la agencia de viajes por mis boletos. Aún me faltan por conocer varias ciudades de mi México querido. Incluyan también Brasil, España, Francia y Japón. Del resto del mundo lo negociamos.

Para terminar con las peticiones, no olviden traerme una cámara. Mi camarita murió el año pasado y he andado por la vida lagrimeando sin ella. Me ha costado superarlo. Es necesaria para los conciertos y para los viajes. Les prometo que les tomaré una linda foto con toda y sonrisa.
De pilón un scrabble. Es un juego de mesa sumamente divertido. Si no lo saben jugar, yo les enseño.

No se preocupen por venir a tierras mexicanas. Aquí no pasa nada. Nadie les hará daño. No tengan miedo si ven muchos policías o soldados. No tendrán problemas con el incremento de precios e impuestos, ni con extorsiones, ni robos, ni violencia, ni discusiones de colores políticos, ni nada que sea negativo. Lo que escuchan a través de los noticieros es pura ficción. Sus camellos serán respetados.

Ustedes más que nadie saben que México es maravilloso. Más no perfecto. Así que olvídense de mis deseos y vayan a cumplirles a los huérfanos, a los enfermos, a los necesitados y regálenle juguetes artesanales mexicanos que son bellísimos.

Eso sí, abríguense bien. Respiren profundamente del aroma de la tierra del café, descansen en su parque, disfruten de la rosca y envuélvanse con la hermosa cultura que les ofrece cada pueblo mexicano.

Gracielita