miércoles, diciembre 03, 2014

Alma

Foto: Graciela Barrera


Alguien que me recoja como a un perro humilde, que me abra la puerta, me regañe, me alimente, me quiera severamente como a un perro, eso es lo que quiero, como a un perro, como a un hijo.

Clarice Lispector



Te nombré Alma. Solo aquellos que comprenden la esencia de la vida pueden comprender tu nombre. La gente dice que me gané el cielo por haberte adoptado. Esa misma gente tuvo la oportunidad de adoptarte y no quiso. Algunos te despreciaron por verte tan flacucha e indefensa, y quizá, hasta fea. Otros, te corrieron de sus casas. Y, otros más, les diste lástima. Ahora te miran y no creen que seas aquella perrita que andaba vagueando por las calles de nuestro barrio. Te miran tan cambiada y tan hermosa. Me felicitan y yo sonrío. Y les cuento que fui afortunada porque tú me encontraste. Simplemente te di un apapacho y con eso bastó para que cada noche me esperaras a que llegara del trabajo sólo para recibir una caricia. Confieso que no te di de comer, tenía miedo de que te quedaras. Me resistía a tener a alguien más en casa. Estaba ya superado mi luto por Movie, pero no me sentía preparada para recibirte en casa. Pero tus ojos color miel me cautivaron y convencieron que serías buena a mi lado. Y tus ojos cumplieron el mensaje. Sí, entraste tímidamente a mi casa, un poco asustada y ansiosa. Con el transcurrir del tiempo supe que habías sido maltratada siendo una perra callejera. Ahora tal parece que eres una princesa. Nunca me imaginé que fueras tan inteligente, noble y agradecida. Has cumplido un año a mi lado, pero siento que has estado una eternidad. No tienes edad y menos una raza definida. ¿Qué importa? Tu alma es mi memoria.


3 comentarios:

ÍndigoHorizonte dijo...

Es ALMA.

Besos. Y añiles.

Tesa Medina dijo...

Que bella luce alma, y que hermosura de texto, Graciela.

Quien no ha amado a un animal no sabe cuanto se pierde.

Un beso,

Citla dijo...

Hermosa Alma